Varios días seguidos viendo como más o menos la lluvia estaba continuamente en Murcia, todos preocupados y pidiendo que cesase para poder celebrar el Festival contra el cáncer, la empresa poniendo plástico sobre el albero y trabajando minuto a minuta para no tener problemas. Amanece una mañana con Sol y se los hombres se ponen mano a la obra para dejar el ruedo en inmejorables condiciones, tras "la paliza" un chaparrón "de miedo" el cual podría haber facilitado suspender el festejo, se cobra el seguro se dona a la aecc y resuelto. Pero aquí abajo mirando al cielo un hombre llamado Ángel "se la juega de verdad" poniendo todo su corazón y opta por no dejar a la afición de Murcia sin "El Festival" y cuando aún chispeaba un poco pone a trabajar a todo el mundo (empezando por él) para quitar todos los charcos, descargar albero en todos los lugares precisos del ruedo y aunque se empezase media hora tarde Murcia pudo ver el XXI Festival. Destacar en esta introducción la labor de todo el personal de la plaza, así como de los dos auxiliadores de Sergio Galán que no dudaron en coger los elementos para achicar agua y quitar barro a pesar de estar vertidos de corto.
Por este motivo podemos contar a todos Vds. lo sucedido esta tarde en el Festival a favor de la Asociación Española contra el Cáncer.
Día 22 de Marzo
Algo más de tres cuartos de plaza en los tendidos
Novillos y Toros de Fermín Bohorquez y de Enrique Ponce.- Bien presentados y de juego desigual. Aplaudidos en el arrastre los cuatro primeros, pitado el quinto y silenciados los dos últimos.
- Sergio Galán (rej.) .- 2 orejas
- Enrique Ponce.- 2 orejas y rabo
- Javier Conde.- Oreja
- Rafaelillo.- 2 orejas y rabo
- El Cid.- Ovación con saludos desde el tercio
- Paco Ureña.- 2 orejas
- Antonio Puerta.- 2 orejas y rabo
Total= 11 orejas y tres rabos
Abrió plaza el rejoneador Sergio Galán que mostró su buen hacer y la buena doma de sus cabalgaduras, destacó la manera de parar al toro en el mismo centro a base templar su embestida tanto con la cola como con la grupa del caballo, dejó un sólo rejón de castigo y luego sobresalió en par de banderillas al quiebro y con otro a dos manos, para terminar, tras tres banderillas cortas y la rosa con un rejón de muerte en todo lo alto y paseando las primeras dos orejas de la tarde.
Buen toro el primero de la lidia a pie, que además tuvo la suerte de encontrarse con su ganadero, el cual lo recibió con unas Verónicas muy pausadas y con mucho gusto. Fue su mayoral - José Palomares - el que picó al toro enganchando de largo y sin rectificar. Pero cuando Enrique Ponce comenzó con la muleta en la derecha y la pierna genuflexa comenzó a ver torear de verdad, de sus manos salían derechazos preciosos y con la izquierda unos naturales que fueron auténticos carteles de toros, una faena templada en todo momento con un mucho gusto y una lentitud inigualable. Mató de un estoconazo y paseo los máximos trofeos.
Javier Conde es un auténtico artista y los artistas precisan continuamente de la inspiración y en la tarde de hoy "las musas han pasado de mi" que decía Serrat en sus canciones, dos pequeñas pinceladas y la generosidad del público en este festival han sido suficientes para pasear una oreja ante un toro sin dificultades de ninguna clase ante el cual no se ha visto seguro el malagueño.
Rafaelillo salió en sustitución de Paquirri y quiso demostrar que sigue siendo el mismo de siempre, tema conseguido con creces desde el minuto uno. Recibió con dos faroles rodilla en tierra y una larga cambiada en la misma posición y una buena serie de Chicuelinas. Ya con la muleta y ante un toro que tenía sus problemas consiguió someterlo a base de hacer la faena que tenía, para una vez parado el de Ponce darse un auténtico arrimón y recetarle una buena estocada, luciéndose mientras el toro se mantuvo en pie. Paso las dos orejas y rabo en premio a una gran labor.
El garbanzo negro del encierro le correspondió a El Cid que se gustó con el capote y no encontró opciones ante un toro complicado sin casta y falto de fuerza, donde se mostró con ganas pero sin poder sacar nada reseñable, escuchando una fuerte ovación del respetable que le obligó a saludar desde el tercio.
Paco Ureña demostró su buen momento actual, gustándose tanto el pases de recibo como en el quite realizado, todo con lentitud y gusto, a pesar del sosote toro tocado en suerte, el cual no humilló en ningún momento, pero el de Lorca puso todo de su parte y exprimió incluso lo que no tenía el animal, le arrancó pases que el toro no quería y terminó poniéndose en terrenos complicados, tras un pinchazo sin soltar metió una estocada de efecto fulminante y paseó las dos orejas.
Si en lugar de estar en el Festival de Murcia, ese novillo y esa faena lo hubiera realizado Antonio Puerta en Madrid, todo el mundo del toro estaría en estos momentos hablando del de Cehegín y además con razón. Recogió con gusto y torería al último de la tarde, el cual derribó al caballo y armó un auténtico lío sin acertar nadie a sujetarlo, menos mal que surgió el capote de Antonio Cama y consiguió la tranquilidad que se precisaba en ese momento, tras cambiar el tercio se pusieron dos buenos pares de banderillas, tanto de Salvador Lobato como de Mariano de la Viña. Con la franela Antonio entendió perfectamente a su oponente, que buscaba en todo momento marcharse fuera de la pelea, encelándolo y poniendo siempre el trapo para evitar que se marchase, realizó una faena seria, con temple y mucho gusto, llegando a dar series en redondo por ambas manos sin mover los pies del albero y todo ello por bajo y lentitud, terminó con unas bernardinas muy ajustadas y tras un primer pinchazo una estocada en lo alto de efecto fulminante, para conseguir pasear las dos orejas y el rabo.
Y ahora... ¡Ya puede llover durante la semana!
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